sábado, 13 de febrero de 2016

La Campana de los Sueños

Muy buenas psicocineros,

Aquí sigo, sólo estaba ausente, con mi vida y mi creatividad en pausa, más bien con la expresión y la comunicación en pausa. Pero hoy me siento con ganas de darle al Play y volver a compartir.

Para los que ya sepan y para los que no, actualmente estoy pasando por uno de esos momentos en la vida que llamamos duros, pero que no son más que experiencias maravillosas y oportunidades para crecer y aprender. Y como ya no quiero etiquetar más a personas, situaciones o cosas, basta decir que me estoy sometiendo a un tratamiento de quimioterapia y radioterapia para que os hagáis una idea de qué se trata.

Bueno hoy no quería venir aquí a contaros mi experiencia ni mi camino, ya habrá tiempo para eso de forma más extendida. Este post será breve, intenso y profundo. Para masticar, releer y llegar muy hondo.

El núcleo principal de este post es un poema que he escrito mentalmente en mi sesión de radioterapia de hoy. Cada día me pasan cosas diferentes por la cabeza durante esos 10 minutos que se hacen tan cortos y que en mi mente cunden para tanto, ya sea para pensar, soñar o echar una siestecita. Hoy he escrito un poema mental y al salir, por primera vez desde mi último post (estaba embarazada) lo he escrito y de esta manera he vuelto a materializar mi blog, mi deseo de comunicar y de compartir con vosotros, de seguir psicocinando.

Lo primero os pongo en situación. Una vez a la semana voy a quimioterapia y allí hay una campana que se llama "The Bravery Bell", la Campana de la Valentía, la cual cada vez que alguien termina su última sesión toca, las enfermeras aplauden y le desean a esa persona no volver a verla nunca por allí. Es algo muy significativo y muy simbólico y yo, la primera vez que lo presencié, con esa vía puesta y ese veneno sanador recorriendo mis venas me emocioné, mucho y lloré, mucho también. La semana que viene será mi turno de acercarme a ella y hacerla sonar hasta que resuene en las 23 plantas del hospital.

Pues bien, en la planta de radioterapia no veo ninguna campana ni nada parecido, es más, creo que la radioterapia está infravalorada y a mí me parece tanto o más dura que la quimio. Es larga, es pesada, es diaria, tiene muchos efectos secundarios, te provoca agotamiento, bueno y qué más decir... Así que en estas he pensado que después de mi último día en dos semanas voy a preguntar por la campana, y como creo que me van a decir que no hay pues me voy a poner manos a la obra para donar una al hospital.

La Campana de los Sueños va a ser su nombre y a su lado este poema.


Soñar con llegar al final
Soñar con volver a empezar
Soñar porque estás muy cansado
y hay días que no puedes levantar
Soñar con los buenos momentos
Soltar, los malos, soltar
Agradecer el camino que viene
Perdonarnos todo y amar
Creer que esto no fue una pesadilla 
Crear todo un sueño para despertar



Cómo habéis visto, hoy no me quería extender para nada, sólo volver a compartir, comunicarme con vosotros que es lo que me gusta. A los que ya estabais y seguís aquí, Gracias. A los nuevos que han aparecido en mi vida, Bienvenidos y mucho Amor, y a ti Zuly, gracias por acompañarme en mi despertar.

Por ahora, hasta aquí llego, yo hoy los dejo para que sigan psicocinando ideas.